VISIONES ATLÁNTICAS / 140
Catalogar

Hugo Luengo *

 

 

Catalogar es clasificar con excelencia. Cualquier inventario de cosas, hechos o sucesos puede ordenarse conforme a la valoración de sus cualidades. En Canarias los catálogos patrimoniales se sostienen en la última Ley de Patrimonio Cultural del 2019, que incluye bienes inmuebles, bienes muebles y bienes inmateriales, conforme a sus reconocidos valores culturales. La ley despliega sus competencias entre estado, autonomías, cabildos y ayuntamientos. Catálogos de bienes de interés cultural, catálogos insulares y catálogos municipales. Los dos primeros los gestiona el cabildo y el tercero los ayuntamientos.

 

Todas las leyes autonómicas, estatutos incluidos, diluyen las fronteras competenciales con el estado, al que reducen y con los ayuntamientos que minimizan. Atentando contra la Bolkestein europea, al seccionar los mercados, el cultural incluido, en 17 países. De manera que se prima de facto la deslealtad. En el caso del patrimonio el centro de gravedad se insulariza en los Cabildos, sobrepuestos a los ayuntamientos.

 

Los catálogos se distorsionan con la “Ley de Memoria Histórica” de 2007, hoy “Ley de Memoria Democrática” de 2022, que falsean la historia estableciendo la continuidad de la memoria democrática de la república y con ello dejando sin efecto la Ley de Amnistía del 77, soporte de la Constitución del 78.

 

Ignora la historia la Constitución de la 2ª República del 31, que excluía a las derechas que no la votaron. La Revolución bolchevique del 34 desde el PSOE, el fraude en las elecciones de febrero del 36 y el asesinato del jefe de la oposición, Calvo Sotelo, por la guardia de asalto, escolta del ministro del PSOE Indalecio Prieto. Que precipitó la guerra civil y destruyó toda legitimidad.

 

Hoy en una situación polarizada, se discute desde posiciones irreconciliables, derivadas de la “esquizofrenia discursiva” del gobierno, que está en la base de la pérdida de su credibilidad y confianza. Pasar a una cultura de acuerdo, conllevará la anulación de la legislación ideológica de memoria tramposa de la ley vigente. Que se ha trasladado en vertical, en el fuego cruzado de leyes y marcos competenciales.

 

Facilitamos su lectura desde la acción de dos heroínas del Catálogo en Santa Cruz. Que por razones legales ha retornado al Catálogo del PGO del 92, al suspenderse el último PGO, que en su soporte legal abre la demolición de edificaciones fuera de él, e impele a la administración a cumplir la ley, único espacio donde prosperan las democracias liberales.

 

Desde la Academia de Bellas Artes de San Miguel, Rosario Álvarez, catedrática de Historia de la Música de la ULL, en defensa de los valores del monumento, escultura y fuente, de Juan de Avalos, Homenaje a la Paz-Ángel Caído, que, protegido por las propias leyes de memoria, por su calidad histórico artística, lo deslegitima el Cabildo de Tenerife, con informes universitarios de pago.

 

Ha sido el Tribunal Superior de Justicia de Canarias, quien por tercera vez lo defiende cautelarmente, a la vista de la sectaria gestión de un “Catálogo de Protección de Patrimonio Regional”, que pretende aplicarse a un solo ayuntamiento de 88, y defiende nuestro alcalde.

 

Nuestra segunda heroína y desde la sociedad civil, Dulce Xerach, presidenta de la Asociación de Amigos del Espacio Cultural El Tanque, que recupera un vestigio de nuestra Refinería que desaparece, patrimonio industrial, donde el tiempo como con el Ángel Caído, reforzará su singularidad; luego de 26 años de inaugurado, casi 100 de la refinería.

 

Reconocido por el Premio europeo AHÍ de intervención en el Patrimonio, por el jardín de plataneras de reciente ejecución, “nostalgia en vena”, recuperando la memoria del cultivo anterior a la refinería, nostalgia al cuadrado, cultura. Nuestras dos heroínas han multiplicado su valor, con la proyección exterior a Canarias y el soporte en la sociedad civil activa.

 

 

*  Hugo LUENGO BARRETO

Arquitecto y bodeguero.

 

Islas Canarias, 25 de junio de 2023