EL MONÓLOGO / 176
Entre llamas y política general

Por Pepe Moreno *

 

 

Pensaba escribir esta semana sobre la posibilidad de que Madonna interpretara su canción “Isla Bonita” que hace tantos años oímos y que siempre hemos relacionado con La Palma, isla a la que conocemos por ese adjetivo. La canción, en sí, no habla de ninguna ínsula concreta, y lo deja todo en el aire, pero cabe la posibilidad de creer que se refiere a la gente de este archipiélago atlántico. Por lo tanto, iba a escribir sobre esta propuesta y unirme, en pensamiento, palabra y obra, a Miguel Santos, periodista con una larga trayectoria profesional, que incluso en el pasado fue asesor de la mayor sala/espectáculo musical que se hizo en Tenerife y que tuvo un periodo de tiempo escaso para ver su proyección en el futuro.

 

Además, ya se han ocupado de este asunto periodistas de gran prestigio y el tema de su concierto palmero ha tenido repercusión en los medios de comunicación de todo el Archipiélago, por lo que me lleva a pensar que esta cuestión podría ser tratada en cualquier momento. Y más aún cuando hemos sabido que la reina del pop se recupera en Portugal y que se han confirmado las fechas de su gira por Europa, incluyendo las dos actuaciones en Barcelona, los días 1 y 2 de noviembre en el estadio Palau Sant Jordi. De todas maneras, en este momento, no hay nada de una posible actuación en La Palma.

 

Pero claro, uno supone, y la actualidad y la realidad disponen. Hablar de la reina del pop, no resulta tan relevante frente a lo que está pasando a nuestro alrededor, con un incendio que tiene todas las características que siempre hemos temido o con la constitución de un Congreso de los Diputados, que tuvo lugar en la mañana del jueves. Estos hechos, el incendio y la constitución de las Cortes, han sido las noticias más importantes de las últimas horas. Por tanto, vamos a hablar de estos dos asuntos, mucho más actuales y en los que puede haber tanta opinión que es posible que nos saturen, pero no por ello podemos evadirnos de lo que sucede.

 

Por ejemplo, el incendio forestal. Estamos todos pendientes de lo que sucede. El trabajo que se está haciendo desde la Televisión Canaria es notable y está ayudando mucho a que nos hagamos una idea de lo que está pasando. Por encima de entrevistar a responsables y de que escuchemos a las personas que nos transmiten lo que pasa, es fundamental oír también el relato de aquellos que están cerca del fuego y que nos cuentan lo que están viviendo.

 

Sin embargo, también es necesario huir del “cuñadismo” que algunos intentan hacer en estos momentos. Hablar de base permanente de hidroaviones, pedir ayuda a Marruecos o buscar culpabilidades en los actuales dirigentes es simplemente nefasto a la hora de buscar soluciones a lo que está pasando. Hace años, cuando uno era chico, siempre nos decían que un incendio sería imparable si iba del sur al norte y afectaba a la masa forestal dorsal. Y eso es lo que está pasando. El incendio afectó en un principio al monte en Candelaria, se pasó a Arafo y ya está en territorios de los municipios del Norte como La Esperanza, Santa Úrsula, Tacoronte e incluso ha llegado a La Orotava.

El Parque Nacional de El Teide, que es nuestra joya de la naturaleza, está en peligro. Todos los accesos por carreteras y caminos forestales están cortados y ahora mismo se está echando agua en la zona afectada.

 

En este punto podríamos preguntarnos ¿por qué no se ha decretado el nivel 3 y el Estado no ha mostrado su interés, a través del Ministerio del Interior, por este fuego que va a ser difícil de apagar? ¿Tendría algo importante que hacer el ministro Grande-Marlaska? Posiblemente, estar pendiente de su vida política, aunque también hay que reseñar que no han negado nada de lo que se ha pedido: Hidroaviones, helicópteros especiales, personal y material necesario para que siga la lucha contra el fuego.

 

No se han producido grandes tomas de decisiones. Se confinaron a miles de personas en la madrugada del jueves y se levantaron las prohibiciones en horas de la tarde de ayer viernes. Las llamas afectaron al canal de Aguamansa y se procedió al arreglo, sin que su corte afectara al suministro a poblaciones. La situación es grave, porque lleva varios días ardiendo el monte y las temperaturas están subiendo y la humedad desapareciendo.

 

Pero claro, buscar el apoyo del Estado para que se hiciera cargo de este incendio es algo como decir aquello “sigue tú, que yo no puedo” y obviamente, eso no cabe ahora mismo. También hay quien dice lo de “échame una mano que no puedo con todo” y parece que eso es lo que ha pasado.  Sin los recursos que han llegado desde la Península en las últimas horas, que dependen totalmente de la Administración Central, no hubiéramos podido disponer de tanto hidroavión y de la colaboración fundamental de los militares de la UME.

 

Ya han llegado tres hidroaviones y un helicóptero pesado Kamov K-23, que ayer repostaba en Soria y después seguiría hasta Cádiz y de ahí a Tenerife, donde comenzó a trabajar en cuanto llegó. Es posible que algunos de los que me leen puedan decir que podría haber llegado antes, pero yo creo que los plazos están dentro de lo posible y más si tenemos en cuenta de que la masa forestal de España es mucha y, por lo tanto, no se pueden dejar desasistidos otros territorios que también lo necesitan.

 

También hemos oído eso tan socorrido de que el fuego está en una zona “de difícil acceso, muy escarpada y abrupta…” ¿Y qué esperaban en una zona de monte? Habitualmente es una zona rural y, por tanto, hay barrancos y grandes fugas en esos lugares, por lo que tiene, por naturaleza, que ser abrupto y escarpado. Las llamas no corren por el terreno llano que uno quiere, sino por trazados difíciles en los que no siempre es posible atacarlo desde tierra. Por eso a las brigadas de bomberos forestales tardan, les cuesta trabajo llegar y cuando lo hacen trabajan en condiciones difíciles, por lo que sus labores deberían ser más valoradas. Pueden hacerlo por tierra o por aire, depositándolos helicópteros en zonas próximas, pero son gentes dispuestas y preparadas para luchar contra las llamas y no expertos en lanzamientos desde esas aeronaves.

 

Hemos asistido, además, a bulos que hablan de cortes de luz, de siniestros varios y de averías en algunos servicios. No se ha producido nada de eso, pero los amigos de catastrofismo han sembrado una serie de noticias falsas que algunos se han creído a pies juntillas. Lo peor es que las han difundido por las redes sociales, provocando más desasosiego entre los afectados y sobre todo una angustia entre la población que se acrecienta a medida que pasa el tiempo y afecta a más hectáreas del monte.

 

Los que han difundido este tipo de información no les importa para nada su veracidad, sino convertirse en portadores de unas noticias pesimistas y darle difusión a este tipo de reseñas sin contrastar. En este sentido, Montserrat Román, jefa de servicio de Protección Civil del Gobierno de Canarias, explicaba el pasado jueves que existe un seguimiento continuo con Red Eléctrica y Endesa “para planificar con ellos, y si así se autoriza desde la Dirección del Plan de Extinción, los cortes preventivos que pudieran proponer que se están valorando”.

 

De momento no se han producido cortes en la baja tensión (hogares), y media tensión (centros de producción). La alta tensión se ha ido cortando para facilitar la extinción del incendio y favorecer la seguridad. “Estamos en contacto permanente para ir planificando estas situaciones por si tenemos que avisar de un corte puntual, pero es algo que vamos monitorizando desde aquí”, recordó Román. Por tanto, nada de lo que algunos han difundido y de momento no hay nada.

 

Y luego está lo que han hecho algunos limpiando la pinocha de su entorno. Un tema que tenían que haber hecho hace algún tiempo y no ahora. El “mantra” de que ya no pueden limpiar el monte, que ya no se limpia el monte bajo o que los ecologistas no dejan o que raras veces llegan los permisos necesarios, también hay que cotejarlos. Ya no se utiliza esa “pinocha” en las camas de los animales, no hay quien la compre para usarla como estiércol cuando se pudra y tampoco sirve para otros usos. Por tanto, ese tipo de comentarios poco ayudan en una emergencia como esta.

 

Entiendo que es difícil, ahora mismo, estarse simplemente alerta de lo que está pasando. Los que no vivimos en las zonas afectadas por el incendio nos tenemos que limitar a ver, no podemos hacer otra cosa. Lo que sucedió hace 30 años, cuando pidieron voluntarios para atajar aquel incendio en Los Realejos, no fue, ni de lejos, una posible solución. Fueron gentes en chanclas, sin medios y sin conocimientos de cómo atajar el fuego. Eso hoy es impensable, para eso hay profesionales, y los que quieran ayudar pueden hacerlo como voluntarios en destinos fuera del perímetro forestal y ayudando en respuestas a los acogidos o desplazados.

 

Por eso digo que hay mucho que hacer y poco en apagar los fuegos que está dejando esta desgracia, ni siquiera investigar si el origen pudiera estar en la mente de algún descerebrado. No deberíamos acudir a los montes, al menos mientras dure la emergencia, están las carreteras cerradas y hay gente que está confinada – ¿se acuerdan del término? – pues eso, que mejor dejamos las vías libres para los que necesitan trabajar en las mismas y que nosotros no les estorbemos. Yo sé que esto es difícil de digerir, pero es lo que hay.

 

Si ahora mismo pudiéramos criticar algo podríamos, quizás, poner sobre la mesa la pachorra de los que gobiernan, pero también debemos tener en cuenta que el fuego no se corta con un chasquear de dedos y que podrían en riesgo la vida de los que trabajan en apagarlo. Por tanto, paciencia y ya veremos cómo acaba esto y será el tiempo de pedir responsabilidades. Nuestras maldiciones se centran ahora en aquel que lo provocó y es eso lo que habrá que remediar, que esas gentes no tengan el camino libre para cometer esas tropelías.

 

No me queda mucho espacio para hablar del otro asunto, de la constitución de las Cortes españolas, pero sí que quiero dejar por escrito que Pedro Sánchez será el único de los dos candidatos a la presidencia capaz de atar una mayoría parlamentaria suficiente. Por tanto, el rey debe proponerle formar gobierno.

 

Ahora mismo, resulta difícil saber las concesiones que le han hecho al independentismo. Lo que se sabe es que lo que ha trascendido es poca cosa o que la condición del cambio de parecer de Sánchez pueda dejar en aguas de borraja esas cosas. No obstante, sí que me preocupa la política de hechos consumados aplicada por la nueva presidenta del Congreso, Francina Armengol, permitiendo la utilización del catalán, el euskera y el gallego en el Congreso de los Diputados, sin siquiera pasar por el trámite de la reforma del reglamento de la Cámara. Porque todo este asunto implica una mutación del espíritu de la Constitución, que consagra el español como el idioma oficial en toda España y las lenguas regionales como cooficiales, pero solo en sus respectivas regiones.

 

Hasta ahora nadie en el PSOE ha dado una sola explicación satisfactoria. Cuanto antes exponga el candidato a presidente, Pedro Sánchez, su proyecto y cuáles son sus planes para los próximos cuatro años, antes podrán España y los españoles salir de este periodo de interinidad.

 

El principio de realismo impone sus propias evidencias: o Pedro Sánchez es presidente o vamos a segundas elecciones dada la incapacidad del PP para armar, hoy, una mayoría alternativa. Si algo se demostró en el Congreso es que el PSOE tenía razón cuando decía que ganar las elecciones es importante, pero no definitivo si no eres capaz de aunar una mayoría que te permita gobernar. Y Feijóo no lo ha hecho y además se ha dejado llevar por unos cuántos que le decían lo contrario. Malo es si el hombre no sabía lo que votarían los de VOX para la Mesa del Congreso, y peor si lo sabía y no hizo nada. Sin embargo, de este asunto me ocuparé en el próximo monólogo, si ustedes me lo permiten.

 

 

* José MORENO GARCÍA

Periodista.

Analista de la actualidad.

 

Islas Canarias, 19 de agosto de 2023