El velatorio de la Plaza del Cristo de La Laguna. Un error empresarial con repercusión social.
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Pablo Reyes Núñez *
Nos parece difícil que una empresa se equivoque al hacer una fuerte inversión económica para su expansión y, más aún, si se trata de una empresa consolidada y con prestigio en su sector. Se supone que, antes de arriesgarse a hacer una inversión millonaria, tendría que haber hecho un riguroso estudio de “mercado” para garantizar la viabilidad de su inversión.
Pues, esto no siempre es así, y los errores de cálculo de algunas importantes empresas se producen y malogran el objetivo de su inversión económica. Pensamos que esos errores se dan por no contemplar en los estudios de mercado algunos factores que tienen que ver más con lo emocional que con lo material.
Esto es, a nuestro juicio, lo que ha ocurrido con la empresa Mémora, una de las grandes del sector de servicios funerarios, que ha hecho una fuerte inversión económica para construir y explotar un velatorio en el interior del Santuario del Cristo de La Laguna. Este Velatorio promovido por la “Esclavitud del Cristo” está resultando un enorme fracaso empresarial ya que, después de casi un año desde su inauguración, se ha utilizado tan solo para algo más de una decena de servicios funerarios.
Resulta un tanto esperpéntico contemplar cómo, ahora a la desesperada, y ante el evidente fracaso empresarial, emprenden una campaña publicitaria insólita en este tipo de actividad, en prensa escrita, vinilos en guaguas, regalos a quienes se acercan por las instalaciones y hasta la organización de un funeral en la Catedral de La Laguna oficiado por el Obispo de la Diócesis en memoria de las personas fallecidas en el año, al que hasta se invitó a asistir a las autoridades municipales.
Dado que el Ayuntamiento no autoriza la circulación de vehículos funerarios atravesando la Plaza, algo conocido por la empresa Mémora, ya que se le comunicó por escrito desde la Gerencia de Urbanismo antes de la inauguración, además de la campaña publicitaria para “atraer clientela”, han emprendido una batalla legal contra la decisión del Ayuntamiento contratando los servicios de un importante bufete de abogados, para tratar de conseguir la autorización.
Estamos convencidos que se vuelven a equivocar en sus planteamientos para tratar de corregir lo que es un error inicial y que no solo tiene relación con la prohibición del acceso a los vehículos fúnebres.
Aún, en el muy improbable o prácticamente imposible caso, de que consiguieran esa autorización por parte del Ayuntamiento, siguen sin tener en cuenta que su grave error empresarial tiene su causa en otros factores que no tuvieron en cuenta al hacer su inversión económica.
La decisión de velar a una persona querida en el Santuario del Cristo, no solo se toma teniendo en cuenta la devoción a una imagen emblemática para parte de la ciudadanía de La Laguna y de la Isla de Tenerife, sino que influyen otras razones de peso.
En unos momentos de dolor, lo menos que se le apetece a familiares y personas cercanas a quien despiden, es que, en el exterior del velatorio, haya el bullicio y alegría que son inherentes a una Plaza pública en la que a lo largo del año se producen celebraciones festivas, musicales, deportivas y lúdicas con mucha frecuencia.
Además, el hecho de que en el Santuario del Cristo no se puedan celebrar exequias funerarias, por no ser una parroquia, hace que las comitivas fúnebres tengan que desplazarse a otra iglesia en la que se celebre una misa o acto religioso.
Si, además, los familiares y personas allegadas son conscientes de que ese velatorio ha sido y sigue siendo rechazado por un amplio sector de la vecindad de La Laguna, lo lógico es que se acabe eligiendo otro lugar, por mucho “respeto” que le ofrezca Mémora en su publicidad.
Nuestra Asociación Vecinal, y un sector amplio de la ciudadanía de La Laguna, se opuso rotundamente a la construcción de este Velatorio desde que se tuvo conocimiento del proyecto promovido por la “Esclavitud del Cristo” y seguiremos manifestando nuestra oposición a su funcionamiento.
En numerosas ocasiones hemos expresado los motivos de nuestra oposición, fundamentados principalmente en la utilización de un espacio público destinado al disfrute de la ciudadanía para un negocio privado que desarrolla una actividad que creemos que no es compatible con dicho disfrute.
Creemos que, tanto la empresa funeraria Mémora, como la Esclavitud del Cristo tendrían que hacer un ejercicio de profunda reflexión acerca de su manifiesto error y dar marcha atrás, buscando una alternativa a la utilización de las instalaciones, rehabilitándolas para una nueva utilización, bien sea como Museo del Cristo, tal como estaba planteado con anterioridad, o para otra actividad compatible con el uso público de la Plaza.
De no ser así, además del perjuicio social ocasionado a la ciudadanía de La Laguna, acabarán perjudicando a los accionistas de la empresa Mémora y seguirán dañando y desprestigiando la imagen de la Esclavitud del Cristo de La Laguna.
* Pablo REYES NÚÑEZ
Presidente de la Asociación de Vecinos “Casco Histórico de La Laguna”
Miembro del Foro Económico y Social de La Laguna (FES)
Diplomado en Magisterio por la Universidad de La Laguna (ULL)
Maestro de escuela (jubilado)
Maestro Colaborador del Aula de Etnografía del Museo Pajar del Centro de Enseñanza Obligatoria (C.E.O.) Manuel de Falla, de La Orotava.
San Cristóbal de La Laguna, 20 de febrero de 2024
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