VISIONES ATLÁNTICAS / 197
Los cuentos y las cuentas

Hugo Luengo *

 

 

La realidad y la economía se conforman bajo nuevas construcciones que nos venden desde la política, que se desarrolla al margen de su sociedad civil. Nos recuerda la obra de Josep Borrell (Lérida 1947), “Las Cuentas y los Cuentos de la Independencia” (2015), donde hace un análisis crítico de CDC y ERC, a favor de la independencia de Cataluña y su falso argumentario victimista y económico. Aún en la oposición publicó “Reflexiones sobre la Socialdemocracia y el Futuro del PSOE” (2017), y dibujaba un negro futuro para esta opción en la UE, donde pierde apoyo electoral, sufre una hemorragia militante, y sus discrepancias ideológicas generan fracturas internas.

 

Borrell defendía un partido participativo, un “modelo federal” de país y sociabilizar la política. En 2017 fue cabecera de la manifestación contra el referéndum ilegal, en Barcelona. Todo cambia en junio 2018 con la moción de censura al Gobierno Rajoy, y se incorpora al gobierno del PSOE, como ministro de Asuntos Exteriores por un año.

 

De donde salta a la UE como “Alto Representante de Asuntos Exteriores y Política de Seguridad” (2019-2024). Es sustituido en las Europeas 2024 por Kaja Kallas, 1ª ministra de Estonia y miembro del Consejo Europeo. En agosto toma posesión en una UE desplazada hacia el Este y las derechas. Borrell es un caso singular de personalidad difractada, entre lo que defiende en sus libros y ejerce en la acción política.

 

Está casado con Cristina Narbona (Madrid 1951), presidenta del PSOE 2017, atados a la deriva nacional-comunista de un partido en obediencia autocrática. Ya cesado en la UE nos “cuenta”, contrario a la vinculación bolivariana de su partido, su decidida apuesta por restablecer la democracia en Venezuela, dando ganador a la oposición electoral de Edmundo González Urrutia y María Corina Machado, como lo han hecho EEUU, la ONU, el centro Carter, la OEA, y las democracias de Sudamérica.

 

Desde la distancia de agosto valoramos en clave de humor, el “esperpento” que deforma la realidad con rasgos grotescos y absurdos, donde la política va por libre. De actualidad catalana la oferta de “solidaridad limitada” del “federalismo asimétrico” que nos venden. Cuando es directamente inconstitucional, no es solidario ni federal.

 

Siquiera podemos equiparar su “modelo plurinacional” con el Imperio Austrohúngaro, la República Yugoslava, el Quebec canadiense, la Escocia inglesa o Puerto Rico. Se nos ofrece un “estado confederal parásito”, que arruina la nación y la economía. Asombra que sea el huésped parasitado, quien la alienta y sostiene a cargo del común, primando a tres de las cuatro autonomías más ricas de España.

 

Siguiendo en las derivas políticas nos dicen que su función es “priorizar las acciones para el ciudadano”. Cuando la economía y la justicia se acomodan para responder a sus tribus políticas, Sedición, Código Penal, Ley de Amnistía, TC, nos lo confirman. Lo agrava el hecho de esconder bajo falsos tecnicismos el incumplimiento de las promesas electorales.

 

El más directo en Canarias, no haber rebajado el IGIC al 5% prometido y votado, que el gobierno esconde con “mentiras galantes”, evitando al interno los reequilibrios con cabildos y ayuntamientos y degradando nuestro REF fiscal. Así como el bloqueo nacional del “Consejo de Política Fiscal y Financiera”, que con el Cupo Catalán es imposible regular en esta incierta legislatura. La prioridad nunca es el ciudadano que paga.

 

Con el mismo lenguaje en Canarias se cambia un grupo de gobierno municipal, apelando al vago principio de “emergencia municipal”. Descubren la grave situación económica y de gestión del actual grupo de gobierno y lo sustituyen por uno que lo hará mejor, porque es “emergente”.

 

Esconde la “simplificación imposible”, la “cantonalización” de los mercados autonómicos plagados de “muros” para circular entre ellos, barreras que hemos extendido al mercado único, haciendo ineficaz la “Directiva de Liberalización de Servicios-Bolkestein 2010”.

 

Misma deriva que vemos con los “gravámenes temporales” caso del IGIC, que hacemos extensible a todas las administraciones, que operan subiendo impuestos sin nunca reducir gastos improductivos.

 

Se me escapaba la singular lectura que hacemos en España del “lobby”. Como ejemplo cercano la trama “Tito Berny- Antonio Tacoronte”, “mediadores” que ofrecían ventajas en la contratación pública a cambio de “mordidas”.

 

Comprometieron fondos de la UE para América y África, como hicieron en su día con el caso de los ERES de Andalucía, reconfigurados ilegalmente para la tribu con el polvo del Tribunal Constitucional. Más solidaridad asimétrica. Esperpentos.

 

 

*  Hugo LUENGO BARRETO

Arquitecto y bodeguero.

 

Islas Canarias, 19 de agosto de 2024