VISIONES ATLÁNTICAS / 209
Prefiero la inteligencia artificial

Hugo Luengo *

 

 

Fue la ciencia ficción quien primero aventuró la aparición de la Inteligencia Artificial, cuando el ruso judío neoyorkino Isaac Asimov formuló en 1942, en plena guerra mundial, sus 3 leyes de la Robótica. 1.- No causar daño al ser humano.2.- Cumplir sus órdenes. 3.- Proteger su propia existencia, luego de cumplir 1 y 2. Son las obligaciones de las democracias liberales donde el ciudadano individual es el referente, soporte de la “Declaración Universal de los Derechos del Hombre” de la ONU en 1948.

 

Dos películas “distópicas”, “2001 Odisea del Espacio” de 1968 de Stanley Kubrick; en ella el ordenador central que dirige la nave estelar HAL 9000, se rebela contra la tripulación al ver que quieren desconectarlo, incumpliendo las leyes de la robótica. Como lo hace en “Yo Robot” 2004, VIKI la IA central, sustituyendo el gobierno de los humanos,

 

Ya en 2012 apareció la primera red neuronal precursora de la IA, de Geoffrey Hinton, (Premio Nóbel de física 2024), adquirida por Google, y en competencia desde 2023 con la OPEN AI de Microsoft. Hinton se retiró de esta carrera viendo que en un año se había avanzado lo que se esperaba conseguir en 50; señalando que las múltiples IA se volverán incontrolables. Ya están en marcha en EEUU, China, Rusia, India, Japón y la UE.

 

En pocos años las IA, dominarán todos los sistemas esenciales, energía, finanzas, telecos, defensa nuclear, decisiones políticas y administrativas. No hay acuerdo hoy con los límites que ofrecen las IA con “superlógica cuántica”, donde estas lógicas extensivas van más allá de las limitaciones humanas, no sólo procesando más información, más rápido y más seguro.

 

Sino que serán capaces de crear nuevos paradigmas de pensamiento, operar en múltiples dimensiones de tiempo y espacio y bajo principios que nos alejarían de las propias leyes de la robótica, deshumanizando sus fines.  Las IA   serán capaces de llegar a generar sus propias conciencias. Y operar con lógicas diferentes y más complejas, más allá de las limitaciones humanas.

 

En 1989 fue el propio Asimov quien formuló la “Ley Cero”, donde sustituyó al ciudadano por la humanidad, asumiendo con ello el papel preponderante de los estados que cautivan al ciudadano; al tiempo que degradan las democracias liberales.

 

La UE contra los Informes Draghi y Letti, primero legislan y luego actúan, al revés de las otras potencias. En mayo 2024 en Consejo de la UE aprobó su legislación sobre IA, que tendrá que evolucionar con la realidad e irá invadiendo todas las esferas, incluso superando los límites privados, con estados propensos a recortar nuestras libertades.

 

En la “Nueva Guerra Fría” de un mundo multipolar, el principio de la “Destrucción Mutua Asegurada”, resultará más complejo de controlar y con él se refuerza el poder de los estados.

 

La ciencia ha demostrado que es imparable y sus beneficios en todos los campos serán multiplicados por las IA. Cuando valoramos el ejercicio de las inteligencias naturales, causa estupor ver cómo los gobiernos ejercen sus poderes ajenos al ciudadano, incumpliendo con ello las leyes 1 y 2 de la robótica.

 

La “Ley Cero” que sustituye la humanidad por el ciudadano individual, les permite esconderse en colectivos difusos, dando pie a múltiples derivadas donde el arte de la mentira florece, prevaricación, calumnia, impostura, tergiversación, bulos.

 

Sería por ello preferible confiar las decisiones sociales a las IA, que asegurarán la igualdad de derechos y deberes de todos; como estamos viendo en la desolación del “tsunami” de Valencia. Sin embargo, parece irreal pensar que las derivas totalitarias de los actuales estados, escapen a su interés por usar las IA en su provecho y con ello incrementar exponencialmente su poder y nuestra dependencia.

 

La paradoja del dicho de Confucio. “cuando las palabras pierden su significado, las personas pierden su libertad”, es cercano a la construcción de la “neolengua”, en la obra de Georges Orwell “1984”, donde sólo se podía pensar aquello que figuraba en ella.

 

Estaríamos entonces nuevamente en los escenarios de “rebelión humana”, a los que se vieron abocados a recurrir los ciudadanos de la nave planetaria de 2001 contra HAAL 9000 y en “Yo Robot” contra VIKI, cuando las IA asumieron el control, vulnerando las leyes de la robótica conscientemente; desarrollando el arte de la mentira, como si se tratara del mejor de los humanos. La conciencia genera fines propios, que nos expulsan del paraíso.

 

 

*  Hugo LUENGO BARRETO

Arquitecto y bodeguero.

 

Islas Canarias, 11 de noviembre de 2024