Venezuela, un nuevo rumbo

Rebeca Paniagua Navarro *

 

 

La contundente victoria de Edmundo González Urrutia en las elecciones Venezolanas del pasado 28 de junio es incontestable. Bajo la sorprendente ayuda de cientos de ciudadanos que vigilaron y salvaguardaron las actas de la gran mayoría de colegios electorales, la oposición venezolana liderada por María Corina Machado está cada vez más cerca de presidir el Gobierno del país a pesar de los fraudulentos intentos de Maduro de seguir en el poder.

 

Lo que ha ocurrido clama, una vez más, al cielo. En una democracia como la nuestra sería inaudito que un Gobierno se proclame vencedor sin dar a conocer los resultados de forma oficial; por escrito, mostrando las actas de votación, los escrutinios de cada mesa electoral. En Venezuela, Nicolás Maduro lo ha vuelto a hacer. El Consejo Nacional Electoral le proclamaba vencedor de las elecciones el pasado 28 de julio de manera oral, así sin más. No ha habido aún verificación de las actas electorales, ni parece que la vaya a haber.

 

Lo último que sabemos es que el panel de expertos de las Naciones Unidas ha indicado que la gestión de resultados hecha por las autoridades electorales venezolanas no contó con las medidas básicas de transparencia e integridad que son esenciales para celebrar elecciones creíbles. Algo que niega el Gobierno de Maduro y sostiene que lo aportado por la ONU es mentira.

 

Ante esta situación de máxima tensión por el cambio presidencial incuestionable, las movilizaciones no han cesado dentro y fuera del país, a pesar de la represión del régimen de Maduro. Manifestaciones y concentraciones que han tenido un seguimiento impresionante y que acorralan a un Presidente con el que se pretende llegar a un acuerdo para que su salida del poder sea pacífica y dialogada. Tanto es así que la líder opositora, Maria Corina, está convencida de que Edmundo González, podrá tomar juramento como jefe de Estado a principios de enero de 2025.

 

Se trata de un triunfo aplastante en un país que grita libertad, democracia, derechos, acceso a una sanidad digna y un rumbo distinto al que ha impuesto el chavismo. Venezuela es a Canarias un país hermano. Solo en islas como Tenerife viven más de 50 mil venezolanos que han salido buscando refugio, futuro o volviendo a sus raíces porque descienden de canarios que emigraron en su día.

 

Desde Canarias, el Partido Popular, ha pedido al Gobierno de España que exponga su verdadera posición sobre Venezuela; más aún cuando el propio Maduro llegó a publicar en la red social X un listado de países que habrían reconocido su victoria en las urnas, entre ellos, España. El silencio del Gobierno de Sánchez es desconcertante. Ningún miembro de su gobierno, tan solo el ministro Albares, y porque no le quedó más remedio en el Congreso, se ha pronunciado. Zapatero está desaparecido y Sánchez, de nuevo, de descanso.

 

Estos días he podido leer varios artículos en los que se defiende la postura y la victoria de Maduro. Uno de ellos, del ex secretario de Podemos, Pablo Iglesias, que asegura que, después del ruido, EEUU y Europa acabarán reconociendo la legitimidad del gobierno venezolano y que lo que está haciendo la oposición es negarse a aceptar una derrota en las urnas. Su argumento se basa en cuestiones e intereses geopolíticos para con Venezuela.

 

Sea como fuere, aquí solo hay una verdad y es la victoria detallada y probada de Edmundo González, y, por otro lado, un dictador que quiere seguir permaneciendo en el poder. Maduro ataca a los medios, a las redes sociales, a quienes son contrarios, descalifica e invalida a la oposición y reprime a su pueblo. Pedirle que se retire y abandone la crispación, los ataques, las extorsiones o los secuestros es una utopía porque indudablemente no lo va a hacer.

 

Desde Canarias seguiremos luchando y reclamando quey se reconozca la verdad electoral y llegue la democracia a Venezuela, el país hermano.

 

 

* Rebeca PANIAGUA NAVARRO

Diputada del Partido Popular en el Parlamento de Canarias

Licenciada en Periodismo por la Universidad San Pablo CEU, Madrid

Su lema de cabecera: “Que tu trabajo hable por ti”

 

 

Islas Canarias, 15 de agosto de 2024