Elegía a Juan Barbuzano, el luchador que elevó la Lucha Canaria a la categoría de arte y ciencia

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Juan Barbuzano Martín (1945-2023), el ‘Pollo de Isora’ y posteriormente el ‘Pollo de El Hierro’, Hijo Predilecto de la isla, falleció la madrugada del 31 de marzo de 2023, dejando un legado de éxitos. Su impresionante carrera deportiva comenzó con 15 años en el Club de Luchas Ferinto y pronto destacó en el deporte. Entró a formar parte de la selección de Lucha Canaria de la isla de El Hierro y pronto se convirtió en un referente. El también herreño Eligio Hernández Gutiérrez, otro referente de la Lucha Canaria, le dedica el siguiente artículo a Juan Barbuzano, el mismo día de su fallecimiento.

 

 

Eligio Hernández Gutiérrez *

 

 

El Hierro ha sido una de las granes cunas de legendarios luchadores de lucha canaria. Los niños herreños de mi generación y de las anteriores, crecimos jugando luchando, y luchando jugando. La lucha canaria ha sido mi pasión, a la que he dedicado toda mi vida profesional y política, como luchador, tempranamente retirado por motivos de estudios, y como federativo en las dos provincias canarias.

 

He conocido y tratado a todos los grandes luchadores de Canarias de la segunda mitad del siglo XX y del actual, los cuales me dieron a conocer a los mejores luchadores de la primera mitad del siglo XX. Tengo pues en mi memoria y en mi corazón un conocimiento secular personal y por tradición oral de la lucha canaria, lo que me permite afirmar, sin ditirambo, que Juan Barbuzano ha sido el luchador técnicamente más completo de todos los tiempos, opinión que me avaló mi padre, Eligio Hernandez “Yiyo”, uno de los íconos del arte puro de la lucha canaria herreña.

 

Juan Barbuzano ha encarnado como nadie las virtudes y los valores de nobleza e hidalguía ancestrales de la lucha canaria y del pueblo canario. La hidalguía (sinónimo de caballero noble y generoso) y la nobleza del deportista autóctono canario es mucho más profunda y de mayor grandeza que la del caballero medieval o que el de la nobleza aristocrática.

 

Nuestro linaje es el del humilde campesino, que, para ser un verdadero caballero, como dijo Cervantes en boca del hidalgo Quijote, tiene que seguir el camino de la virtud, el de la más importante, que es la nobleza, de la que Juan Barbuzano ha sido un arquetipo inigualable, como caballero en el terrero, que nunca tuvo ni un gesto hostil contra el adversario vencido, al que levantaba del suelo con un abrazo fraternal, que se premiaba con aplausos multitudinarios.

 

Juan Barbuzano es el luchador que mejor ha personificado la definición la nobleza e hidalguía del luchador canario que nuestro más insigne escritor y periodista Leoncio Rodriguez,  en el año 1920, con pasmosa exactitud, describió: “debe ser nuestro deporte por excelencia, por su arte, su plasticidad, y su intensa emoción”, añadiendo estas hermosas palabras: ”La lucha canaria es la fuerza al servicio del ingenio del combatiente, la hidalguía del vencedor con el vencido, la sutileza y la bravura, el combate duro sin sangre, y, tras el combate, la mano que se tiende generosa y caballeresca para levantar al caído y darle el abrazo de paz y fraternidad como remate triunfal”.

 

Soberbio y sereno Barbuzano en el terrero. Estudiaba al contrario para saber que “maña” tendría que emplear para tumbarlo, que ejecutaba a la perfección con destreza, ingenio, y habilidad, de una limpieza, elegancia y fino estilo que recordaba a Martin y Méndez, los legendarios luchadores herreños de principios del siglo XX. Como dijo el poeta Garcia Cabrera de un luchador imaginario de la Victoria, pueblo en el que Juan creó una ejemplar familia y le dio a su equipo grandes victorias:

 

Él le imprimía a la lucha
bríos de cumbres y mares y trabajaba la brega,
desde el comienzo al remate,
como un hijo que se gesta
en el vientre de una madre.
Nunca se vio luchador
de tan viriles quilates
caer vencido en la arena
con tanto temple y coraje.

 

Tras un lento calvario de sufrimientos, la muerte lo ha derrotado, pero, como también dijo el citado poeta gomero:

 

Porque a veces las derrotas
tienen las alas de un ave
y en vez de rodar por tierra
se remontan en el aire.

 

Siempre que escribo una elegía a un ser querido, la corono con una frase que plagio de las Termas de Caracalla de Roma: “Te recordaremos siempre amigo Juan, en invierno y en verano, lejos y cerca, mientras vivamos y después”, y cada vez que visitemos tu Museo de Frontera, y en cada Bajada, con los tambores, chácaras y pitos tocando a la Virgen de los Reyes.

 

La lucha canaria y la memoria de los luchadores como tú, no morirán nunca, porque está en los veneros del pueblo canario, mientras el Teide ondee en el atlántico y se canten las folias, como dijo el poeta Manuel Verdugo.

 

 

Eligio HERNÁNDEZ GUTIÉRREZ

Presidente de la Sociedad Civil de Canarias.

Abogado en ejercicio y Magistrado jubilado.

Ex fiscal general del Estado y ex miembro del Consejo de Estado

Ex diputado en el Parlamento de Canarias.

Ex Gobernador Civil de S/C de Tenerife y Delegado del Gobierno en Canarias.

Ex miembro del Tribunal Superior de Justicia de Canarias.

Académico de la Academia Canaria de la Lengua.

Licenciado en Derecho por la Universidad de La Laguna (ULL)

Diplomado en Derechos Humanos por la Universidad de Estrasburgo.

Vicepresidente de la Fundación Juan Negrín.

Militante socialista.

Cristiano militante.

 

 

Santa Cruz de Tenerife, 31 de marzo de 2023.

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