VISIONES ATLÁNTICAS / 122
Tragar sapos

Hugo Luengo *

 

 

“Si hay que tragar sapos, se tragan”, le responde al “César Visionario” desde Bruselas, el parlamentario de su grupo en la UE, presidente de la Comisión de Libertades Civiles. Tres veces se precipita, con el “si” condicional, que anticipa la voluntad de su autócrata. Se desliza poniéndose a “tragar sapos” priorizando el interés del contrario, al que anticipa la voluntad de asumirlo.

 

Negociador perdido en un tema tan delicado como el Sáhara español, frontera sur de la UE, vecino principal del reino de España y colindante con Canarias; quien mantiene relaciones históricas, culturales y familiares, en un territorio sin descolonizar sujeto a las reglas del derecho internacional.

 

Triple acción atropellada de nuestro “Chamberlain” canario contra la UE. Las negociaciones con “apaciguamiento” han producido en la historia dramáticos resultados, como los “Acuerdos de Múnich”, entre el Reino Unido y Hitler en 1938 cediéndole los Sudetes de Checoslovaquia, que precipitaron la segunda guerra mundial.

 

A “tragar sapos”, en una negociación, que con Marruecos nos ofrece un saldo comercial positivo de 900 meuros, mientras con Argelia restamos 3600, comprometiendo el suministro y coste del gas. Sorprendidos en una negociación, donde al final no apareció quien manda de contrario.

 

Mohamed VI, rey de Marruecos, jefe de Estado y de las Fuerzas Armadas, Comendador de los Creyentes, Rey constitucionalista y propietario de la primera empresa del país, el grupo ONA-Al Mada -SNI. Mohamed VI se sitúa en un escalón por encima de sus primeros ministros., donde coloca a nuestro premier, para que sepa cómo debe tratarse a un rey.

 

Le obliga a rendir pleitesía ante el sepulcro de Hassán II su padre. En el memorándum, con su homólogo Aziz Ajanouch, asume las cesiones sobre el Sáhara acordadas por él, sin apoyo de su Consejo de ministros, ni del Parlamento, ni del primer partido de la oposición; dejando en el limbo la soberanía de Ceuta y Melilla; españolas 500 años antes del Reino de Marruecos en 1956.

 

Firmó acuerdo para potenciar el castellano, que prohíbe en Cataluña, contra la mayoría de sus ciudadanos, contra la ley y las recomendaciones de la UE, que son competencia nacional, según le dicen Vera Jourova y Didier Reynders, Comisario de Justicia.

 

A “tragar sapos” nos obliga su acuerdo con ERC, donde el PSC como socio minoritario, le da dos embajadas más en el exterior, sumadas a las 18 existentes, aumentando la financiación del Diplocat. Asume la mentira histórica de los “fundamentos milenarios de Cataluña”, mientras pagamos 336 meuros de TV3 y su Radio. Con las comunidades del régimen común que piden un pacto de financiación, que se aleja de ellas, raptado por Cataluña y las desigualdades consentidas a los regímenes forales del País Vasco y Navarra.

 

“Tragar sapos”, con un pacto de rentas, ya resuelto sobre el principal cuerpo electoral. Actualizando las pensiones al 8,5%, otro 8% a los funcionarios, considerando en el coste el pago del recorte de jornada laboral y otro 8% en el Salario Mínimo Interprofesional. Todos ellos suman 14,7 millones de votantes, el 50% del total.

 

Decisión al margen de la España productiva que lo paga, penalizando a los más débiles. El mayor sapo a tragar, el de la “verdad”, cuando institucionalizamos la mentira. Como vemos con la técnica del goteo de la “Ley Si es Si”, donde nos ofrecen ideología, relato, adanismo y marketing.

 

No teorizo sobre la transformación fraudulenta de la Constitución del 78 por este “multiculturalismo neocomunista”, que contra la razón solo produce despropósitos y distorsiona la proporcionalidad de las leyes. Como con la “Ley Trans”, que niega la biología, la Ley Animal, que los hace sintientes.  Será más barato matar que violar, los animales por delante del hombre. Ley Mordaza a la libertad. Los trenes más grandes que los túneles. Acabar con el “gran sapo”, y regresar al mundo de la razón.

 

 

*  Hugo LUENGO BARRETO

Arquitecto y bodeguero.

 

Islas Canarias, 13 de febrero de 2023